Organización Editorial Mexicana
3 de enero de 2011
Nidia Marín / El Sol de México
Ciudad de México.- Segunda y última parte
El Distrito Federal es la entidad del país que reportó la mayor incidencia de agresiones y delitos de homofobia, con 317 casos; en segundo lugar, el estado de Guanajuato con 47, de los cuales, 33 fueron homicidios, y en tercer sitio el estado de Veracruz con 40 casos.
Así lo indicó el Informe Especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos Sobre Violaciones a los Derechos Humanos y Delitos Cometidos por Homofobia, el cual precisó que la vía pública es el lugar donde ocurren el mayor número de incidencias, seguido por los centros de reclusión, en tercer lugar los domicilios y en cuarto lugar los centros de trabajo.
¿Y quiénes son las autoridades y servidores públicos que agreden a esta población? Entre los señalados como probables responsables de violaciones a los derechos humanos se encuentran, en primer lugar, los integrantes de los cuerpos de seguridad, particularmente los del ámbito estatal y municipal, a los que señalan principalmente por detenciones arbitrarias, lesiones, amenazas, robo, extorsión, allanamiento de morada y uso excesivo de la fuerza pública, entre otras.
En el segundo sitio se encuentran las autoridades de los centros de reclusión. Las responsabilizan de negar la ubicación de personas privadas de su libertad en zonas para homosexuales que lo solicitan, maltrato por el personal de custodia, deficiente atención médica y agresión física por parte de otros internos.
Las agencias del Ministerio Público se colocan en tercer lugar, aseguró el organismo, principalmente por el trato despótico, la discriminación, las irregularidades en la integración de las averiguaciones previas, así como la falta de investigación o deficiente integración, y el negarse a iniciar una averiguación por algún delito denunciado.
"En este contexto, llama la atención que sean las autoridades escolares las que en varias ocasiones, cometan actos de discriminación en contra de alumnos y profesores en el desempeño de su labor", recalcó.
* Una triste situación
Otro planteamiento que realiza la CNDH en su informe, es que actualmente no existe un censo para determinar la cantidad y condición de minoría de tal población. "En México, en muchas ocasiones ha sido marginada por diversos sectores de la sociedad, pero lo más delicado es el hecho de que los agravios en su contra se consideren, de alguna manera, como conductas aceptadas socialmente por el sólo hecho de tener una orientación sexual y/o una identidad o expresión de género distinta a la heterosexual y, peor aún, el hecho de que, incluso, en varios casos dichas conductas, además, de ser violatorias de los derechos humanos, constituyen delitos como la discriminación, lesiones y homicidio".
Para este organismo nacional, resulta preocupante, además, de la discriminación por parte de particulares, que dicha segregación se presente en distintas instituciones públicas del país, tales como en los cuerpos de seguridad y agencias del Ministerio Público, por mencionar algunas, en las cuales es necesario identificar y erradicar las distintas formas de afectación que se dan en las prácticas administrativas, así como todas aquellas que se encuentran previstas en algún ordenamiento jurídico a propósito de una falta de cultura de respeto a los derechos humanos.
Estas personas consideró, son objeto de agresiones motivadas por un estigma social que genera discriminación, entendida ésta como toda distinción, exclusión o restricción, que basada en el sexo, condiciones de salud, preferencias sexuales o cualquier otra tiene por efecto impedir o anular el reconocimiento o ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las personas y que atente contra la dignidad humana, provoque o incite al odio o a la violencia, o bien que niegue a una persona un servicio o prestación a la que tenga derecho, vejándola o excluyéndola, y viole sus derechos laborales.
"Los miembros de la población LGBTTT -añadió- frecuentemente son impedidos a circular libremente por las calles del país, debido a que son molestados y detenidos arbitrariamente por su sola apariencia, o vestimenta, por realizar manifestaciones públicas de afecto o por encontrarse reunidos en lugares públicos, siendo objeto de tratos ofensivos y discriminatorios en el momento de su detención, su declaración y reclusión por parte de las autoridades; de igual manera, se les restringe el derecho a la libertad de reunión, ya que constantemente son dispersados bajo el argumento de que se encuentran ejerciendo la prostitución o dando 'un mal ejemplo' o 'mala impresión' a la sociedad.
"Peor aún -siguió diciendo- es el hecho que se ha dado a conocer a través de diversos medios de comunicación, sobre el acoso físico y emocional que en algunas escuelas del país se está presentando en contra de adolescentes homosexuales, o contra personas que se identifican con la población LGBTTT, por parte de los mismos alumnos e incluso de algunos maestros, situación que se ha denominado comúnmente como el fenómeno de acoso escolar o "bullying" que, sin duda alguna genera una trasgresión directa a la dignidad por los agravios a los que se tienen que enfrentar jóvenes que, por su orientación sexual, identidad o expresión de género son objeto de discriminación por homofobia".
* Conclusiones de la CNDH
En sus conclusiones, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos advierte que de no atenderse oportuna y eficazmente el existente problema de discriminación en agravio de la población LGBTTT, se pone en riesgo el sistema de libertades, la integridad y la protección de los derechos humanos de las personas de dicha población.
Los delitos y violaciones a los derechos humanos por orientación sexual, identidad o expresión de género, recalcó, "no son hechos aislados, obedecen a patrones de conducta de algunos miembros de la sociedad y del proceder recurrente de ciertos servidores públicos, tales como prejuicios, aversiones y rechazos, lo que refleja la existencia de un problema estructural serio de intolerancia, y que requiere de su reconocimiento expreso y de una atención especial por parte de las autoridades encargadas de promover la educación, la cultura, el respeto a la legalidad y la no discriminación en el país".
La segunda conclusión consideró que el problema de la discriminación por homofobia está provocando un nuevo escenario de inseguridad en México, que es alimentado por la falta de una cultura de respeto a los derechos humanos, y está generando un alto grado de vulnerabilidad en la población LGBTTT, en la cual se percibe una gran preocupación ante una respuesta gubernamental no siempre eficaz,
A ello, se añade "la proliferación de factores como la impunidad, que en algunos casos representan un incentivo para que se cometan delitos y violaciones a los derechos humanos en su agravio, lo cual se convierte en un elemento presente en su vida cotidiana y que repercute en la toma de decisiones sobre su trabajo, vida familiar y, en algunos casos, hasta de conservar su domicilio en el lugar de su residencia, que afecta con ello su bienestar y calidad de vida".
Otra conclusión resalta que la discriminación por homofobia demanda la eficacia de las políticas públicas de educación, salud, justicia y empleo, principalmente; "esto es, que las acciones impulsadas por el Estado mexicano en diversas entidades del país se refuercen para combatir la intolerancia y malas prácticas que permitan a la población LGBTTT acceder a mejores condiciones de seguridad y protección de su dignidad, para que gocen y disfruten al igual que todos los habitantes en el territorio nacional, de los derechos reconocidos en el orden jurídico mexicano sin limitación alguna".
Sin embargo, agregó, "tal situación exige el impulso de una estrategia institucional que logre la participación de los tres ámbitos de Gobierno y la sociedad civil, que comprometa a todos en la suma de esfuerzos para hacer un frente común en la lucha contra la discriminación, con responsabilidades compartidas en la planeación, ejecución y evaluación de las acciones, más allá del mero discurso o muestras de voluntad que poco abonan ante un problema que demanda resultados tangibles, cuantificables y sobre todo con una clara orientación hacia el objetivo que se pretende lograr: erradicar la homofobia".
* Hace varias propuestas
El organismo nacional de los Derechos Humanos formuló en el informe varias propuestas. La primera, señaló la necesidad de reevaluar la eficacia de la estrategia nacional en contra de la discriminación, de manera tal que todos los recursos económicos, tecnológicos, materiales y humanos empleados para tal efecto se apliquen en acciones orientadas a la prevención y su erradicación.
Una política seria y profunda, dice, debe atacar las causas de la intolerancia y prever medidas en el ámbito social, de infraestructura, educación y participación de la sociedad, para prevenir o combatir todo factor que genere agravios. Es necesario promover políticas más efectivas e integrales para prevenir la discriminación por homofobia.
En la segunda proposición mencionó que para garantizar el respeto a los derechos humanos de la población objeto del trabajo, en el sentido más amplio posible, se considera conveniente el desarrollo de los siguientes aspectos:
"1) Establecer indicadores objetivos, por parte de las instancias encargadas de prevenir la discriminación en México, para informar a la sociedad sobre los datos estadísticos respecto de las violaciones y delitos cometidos en contra de la población LGBTTT, para lograr su plena prevención y eventual erradicación.
"2) Detectar y eliminar las prácticas institucionales que generan homofobia, y sancionar eficazmente a los servidores públicos que cometan agravios en contra de personas de la población LGBTTT".
En la tercera propuesta, la CNDH considera fundamental que se erradique la discriminación en México, y se impulse un trabajo conjunto y coordinado en contra de ésta. Se debe entender, precisó, que esta situación requiere del compromiso de todos, y para cumplir con tal cometido es necesario que se estimulen las responsabilidades y se busque la identificación con el tema de la prevención de la discriminación, sobre la base de acciones orientadas a:
Así lo indicó el Informe Especial de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos Sobre Violaciones a los Derechos Humanos y Delitos Cometidos por Homofobia, el cual precisó que la vía pública es el lugar donde ocurren el mayor número de incidencias, seguido por los centros de reclusión, en tercer lugar los domicilios y en cuarto lugar los centros de trabajo.
¿Y quiénes son las autoridades y servidores públicos que agreden a esta población? Entre los señalados como probables responsables de violaciones a los derechos humanos se encuentran, en primer lugar, los integrantes de los cuerpos de seguridad, particularmente los del ámbito estatal y municipal, a los que señalan principalmente por detenciones arbitrarias, lesiones, amenazas, robo, extorsión, allanamiento de morada y uso excesivo de la fuerza pública, entre otras.
En el segundo sitio se encuentran las autoridades de los centros de reclusión. Las responsabilizan de negar la ubicación de personas privadas de su libertad en zonas para homosexuales que lo solicitan, maltrato por el personal de custodia, deficiente atención médica y agresión física por parte de otros internos.
Las agencias del Ministerio Público se colocan en tercer lugar, aseguró el organismo, principalmente por el trato despótico, la discriminación, las irregularidades en la integración de las averiguaciones previas, así como la falta de investigación o deficiente integración, y el negarse a iniciar una averiguación por algún delito denunciado.
"En este contexto, llama la atención que sean las autoridades escolares las que en varias ocasiones, cometan actos de discriminación en contra de alumnos y profesores en el desempeño de su labor", recalcó.
* Una triste situación
Otro planteamiento que realiza la CNDH en su informe, es que actualmente no existe un censo para determinar la cantidad y condición de minoría de tal población. "En México, en muchas ocasiones ha sido marginada por diversos sectores de la sociedad, pero lo más delicado es el hecho de que los agravios en su contra se consideren, de alguna manera, como conductas aceptadas socialmente por el sólo hecho de tener una orientación sexual y/o una identidad o expresión de género distinta a la heterosexual y, peor aún, el hecho de que, incluso, en varios casos dichas conductas, además, de ser violatorias de los derechos humanos, constituyen delitos como la discriminación, lesiones y homicidio".
Para este organismo nacional, resulta preocupante, además, de la discriminación por parte de particulares, que dicha segregación se presente en distintas instituciones públicas del país, tales como en los cuerpos de seguridad y agencias del Ministerio Público, por mencionar algunas, en las cuales es necesario identificar y erradicar las distintas formas de afectación que se dan en las prácticas administrativas, así como todas aquellas que se encuentran previstas en algún ordenamiento jurídico a propósito de una falta de cultura de respeto a los derechos humanos.
Estas personas consideró, son objeto de agresiones motivadas por un estigma social que genera discriminación, entendida ésta como toda distinción, exclusión o restricción, que basada en el sexo, condiciones de salud, preferencias sexuales o cualquier otra tiene por efecto impedir o anular el reconocimiento o ejercicio de los derechos y la igualdad real de oportunidades de las personas y que atente contra la dignidad humana, provoque o incite al odio o a la violencia, o bien que niegue a una persona un servicio o prestación a la que tenga derecho, vejándola o excluyéndola, y viole sus derechos laborales.
"Los miembros de la población LGBTTT -añadió- frecuentemente son impedidos a circular libremente por las calles del país, debido a que son molestados y detenidos arbitrariamente por su sola apariencia, o vestimenta, por realizar manifestaciones públicas de afecto o por encontrarse reunidos en lugares públicos, siendo objeto de tratos ofensivos y discriminatorios en el momento de su detención, su declaración y reclusión por parte de las autoridades; de igual manera, se les restringe el derecho a la libertad de reunión, ya que constantemente son dispersados bajo el argumento de que se encuentran ejerciendo la prostitución o dando 'un mal ejemplo' o 'mala impresión' a la sociedad.
"Peor aún -siguió diciendo- es el hecho que se ha dado a conocer a través de diversos medios de comunicación, sobre el acoso físico y emocional que en algunas escuelas del país se está presentando en contra de adolescentes homosexuales, o contra personas que se identifican con la población LGBTTT, por parte de los mismos alumnos e incluso de algunos maestros, situación que se ha denominado comúnmente como el fenómeno de acoso escolar o "bullying" que, sin duda alguna genera una trasgresión directa a la dignidad por los agravios a los que se tienen que enfrentar jóvenes que, por su orientación sexual, identidad o expresión de género son objeto de discriminación por homofobia".
* Conclusiones de la CNDH
En sus conclusiones, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos advierte que de no atenderse oportuna y eficazmente el existente problema de discriminación en agravio de la población LGBTTT, se pone en riesgo el sistema de libertades, la integridad y la protección de los derechos humanos de las personas de dicha población.
Los delitos y violaciones a los derechos humanos por orientación sexual, identidad o expresión de género, recalcó, "no son hechos aislados, obedecen a patrones de conducta de algunos miembros de la sociedad y del proceder recurrente de ciertos servidores públicos, tales como prejuicios, aversiones y rechazos, lo que refleja la existencia de un problema estructural serio de intolerancia, y que requiere de su reconocimiento expreso y de una atención especial por parte de las autoridades encargadas de promover la educación, la cultura, el respeto a la legalidad y la no discriminación en el país".
La segunda conclusión consideró que el problema de la discriminación por homofobia está provocando un nuevo escenario de inseguridad en México, que es alimentado por la falta de una cultura de respeto a los derechos humanos, y está generando un alto grado de vulnerabilidad en la población LGBTTT, en la cual se percibe una gran preocupación ante una respuesta gubernamental no siempre eficaz,
A ello, se añade "la proliferación de factores como la impunidad, que en algunos casos representan un incentivo para que se cometan delitos y violaciones a los derechos humanos en su agravio, lo cual se convierte en un elemento presente en su vida cotidiana y que repercute en la toma de decisiones sobre su trabajo, vida familiar y, en algunos casos, hasta de conservar su domicilio en el lugar de su residencia, que afecta con ello su bienestar y calidad de vida".
Otra conclusión resalta que la discriminación por homofobia demanda la eficacia de las políticas públicas de educación, salud, justicia y empleo, principalmente; "esto es, que las acciones impulsadas por el Estado mexicano en diversas entidades del país se refuercen para combatir la intolerancia y malas prácticas que permitan a la población LGBTTT acceder a mejores condiciones de seguridad y protección de su dignidad, para que gocen y disfruten al igual que todos los habitantes en el territorio nacional, de los derechos reconocidos en el orden jurídico mexicano sin limitación alguna".
Sin embargo, agregó, "tal situación exige el impulso de una estrategia institucional que logre la participación de los tres ámbitos de Gobierno y la sociedad civil, que comprometa a todos en la suma de esfuerzos para hacer un frente común en la lucha contra la discriminación, con responsabilidades compartidas en la planeación, ejecución y evaluación de las acciones, más allá del mero discurso o muestras de voluntad que poco abonan ante un problema que demanda resultados tangibles, cuantificables y sobre todo con una clara orientación hacia el objetivo que se pretende lograr: erradicar la homofobia".
* Hace varias propuestas
El organismo nacional de los Derechos Humanos formuló en el informe varias propuestas. La primera, señaló la necesidad de reevaluar la eficacia de la estrategia nacional en contra de la discriminación, de manera tal que todos los recursos económicos, tecnológicos, materiales y humanos empleados para tal efecto se apliquen en acciones orientadas a la prevención y su erradicación.
Una política seria y profunda, dice, debe atacar las causas de la intolerancia y prever medidas en el ámbito social, de infraestructura, educación y participación de la sociedad, para prevenir o combatir todo factor que genere agravios. Es necesario promover políticas más efectivas e integrales para prevenir la discriminación por homofobia.
En la segunda proposición mencionó que para garantizar el respeto a los derechos humanos de la población objeto del trabajo, en el sentido más amplio posible, se considera conveniente el desarrollo de los siguientes aspectos:
"1) Establecer indicadores objetivos, por parte de las instancias encargadas de prevenir la discriminación en México, para informar a la sociedad sobre los datos estadísticos respecto de las violaciones y delitos cometidos en contra de la población LGBTTT, para lograr su plena prevención y eventual erradicación.
"2) Detectar y eliminar las prácticas institucionales que generan homofobia, y sancionar eficazmente a los servidores públicos que cometan agravios en contra de personas de la población LGBTTT".
En la tercera propuesta, la CNDH considera fundamental que se erradique la discriminación en México, y se impulse un trabajo conjunto y coordinado en contra de ésta. Se debe entender, precisó, que esta situación requiere del compromiso de todos, y para cumplir con tal cometido es necesario que se estimulen las responsabilidades y se busque la identificación con el tema de la prevención de la discriminación, sobre la base de acciones orientadas a:
- "Propiciar el fortalecimiento de una mayor cultura de la legalidad que facilite el cumplimiento de las leyes y evite la proliferación de la discriminación;
- "Revisar los proyectos de reformas legales que se presenten, a fin de evitar que dichos procesos legislativos impliquen un retroceso en materia de derechos humanos;
- "Asegurar la existencia en las instituciones públicas de un diagnóstico sobre la realidad que en materia de discriminación por homofobia existe en el país, a fin de que las acciones que se emprendan se realicen a partir de la reconstitución del tejido social, y en consecuencia, de la convivencia comunitaria;
- "Está claro que el Estado mexicano es la entidad responsable por la seguridad de los ciudadanos, que debe responder con una perspectiva de derechos humanos a través de instituciones profesionales y competentes. Bajo el marco internacional de los derechos humanos, su responsabilidad debe expresarse en el respeto de estos, y debe actuar con la debida diligencia para prevenir, sancionar y erradicar aquellas prácticas lesivas contra las personas por parte de agentes gubernamentales o particulares, cualquiera sea el ámbito en el que ocurra".
Y en la cuarta propuesta la CNDH señaló como necesario que el Estado mexicano, a propósito de las acciones emprendidas para garantizar la seguridad de los mexicanos, haga sentir a la sociedad, pero sobre todo, a las personas que se encuentran en un alto grado de vulnerabilidad por discriminación, que está realizando el mayor de los esfuerzos para erradicarla, y que asume y redobla su compromiso moral y constitucional de cumplir con la ley, para que ésta se respete y sancione a quien la viole".
Obtenido el 5 de enero de 2011 de: http://www.oem.com.mx/elsoldelbajio/notas/n1910136.htm